Las marcas cobran vida: la visita de Randy

“Nací hace casi 150 años en la ciudad de Nueva york. Mi esencia nunca muere, así como la de todas las cosas que se crean en el mundo. Las dos condiciones para ser inmortales consisten en tener un nombre y ser mencionados al menos una vez al día por un humano, no importa la hora o el lugar. Creo que por esa razón la publicidad factura tantos millones en todo el mundo, nuestros dueños necesitan que nos nombren o sus sueños también desaparecen. 

Antes de salir de las fábricas hacia los almacenes, los productos pasan 2 horas con un tutor senior de marca, el cual se encarga de darles oficialmente su nombre, capacitarlos sobre sus fundadores, historia y función en el mundo; luego al final de la sesión los inyecta con la dosis exacta de personalidad con la cual sobrevivirán en su hogar de destino hasta que sean consumidos por completo.

Todavía recuerdo a Fredy mi tutor, un joven serio de gafas pequeñas, pelo negro y fumador compulsivo. No terminó la sesión hasta asegurarse que había aprendido prácticamente de memoria la historia completa del señor William, desde su nacimiento en 1.783, hasta su muerte en 1.857. La inyección de personalidad es el peor momento del día, duele por varios segundos y sientes náuseas los siguientes veinte minutos, sin embargo una vez termina el efecto puedes ver con claridad como la personalidad de marca se apodera de ti, y no dejas de serlo hasta que algún humano consuma tus últimos gramos. Siempre he querido que quien lo haga sea un niño y despedirme feliz, espero sea así.

Me gusta mi personalidad, cumplo responsablemente con mi trabajo hasta el punto que todos me ven como un profesional, pero aunque me respetan también me quieren porque soy alegre, amigable y cuando no estoy trabajando, me ven muy relajado. Además siempre huelo bien. Todo el mundo me conoce como Colgate, aunque prefiero que me llamen Colgate Fresh. Me pregunto a veces como lo harán en los demás países del mundo donde nos fabrican, si la inyección se siente igual o es distinta a la esta ciudad, estoy en Cali, la capital mundial de la salsa.“

– Psst, Fresh, hasta que hora vas a escribir ?, no puedo dormir con esa luz.

– Son las 11 pm H&S, porque duermes tan temprano ahora? Ya estoy terminando por hoy, hacer una biografía no es tan fácil como parece.

– No sé porque insistes con eso de la biografía, nuestra vida es corta y lo sabes, el día que consumen nuestro último mililitro se apaga nuestra personalidad y al otro día llega el siguiente shampoo. Eso es lo que hacemos.

– Lo sé H&S pero debo hacerlo, tengo la esperanza que Diego encuentre esta biografía y se interese, no te parece justo que los humanos sepan que cuando vivimos con ellos sabemos todo lo que hacen, nos involucramos, nos sentimos parte de su vida y luchamos por su preferencia?, tal vez así nos desechen de una forma más romántica, al menos con un gracias, en vez de lanzarnos en picada al cesto de basura.  

– Diego anda muy ocupado con la reportería, no creo que tenga tiempo de encargarse de eso. Viste a que hora salió esta mañana? se duchó a las 4 30 am y por eso tengo tanto sueño, anda ya a dormir!

– jejeje si, no sé porque olvida tan seguido cepillarse los dientes, hoy me utilizó apenas una vez hace 3 horas. Bueno, cambiando de tema, hablé al medio día con Diana y me contó el plan de Fami, no quieres saber?, tenemos que detenerlo.

– Recuerda que Fami enloqueció, mañana me cuentas. Y no te ilusiones con Diana, el flúor no va bien con el arroz.

Soy una especie de león que es respetado por los demás animales de la selva y por alguna razón lo siguen como líder; por eso siento la responsabilidad de hacer bien mi trabajo de guía al procurar la buena convivencia entre todos. La armonía entre las marcas y entre nosotros con los humanos debe ser mi objetivo principal para perdurar en los hogares por mucho tiempo. 

Quiero narrarles esta historia con mi mejor esfuerzo para que además me sirva como plan B, sí; en caso que H&S tenga razón y Diego en realidad no vea nunca mi biografía, tal vez este segundo escrito llegue a alguno de ustedes, a un humano que se interese en nuestra corta vida y lo que se debe hacer para que sus marcas favoritas nunca mueran. Además tengo mucho tiempo libre porque trabajo dos o treces veces al día con cada humano y el baño no es el lugar más visitado de la casa.

Llevo 15 días en el hogar de Diego y su familia. Su esposa Luisa es asistente administrativa en un colegio privado, el mismo donde estudia su hijo Joaquín que tiene 8 años y un gran sentido del humor; por cierto es el más divertido de los tres. Es una familia tradicional colombiana en sus preferencias de compra, Fredy se encargó de hacerme memorizar las marcas más comunes con las que me iba a encontrar cuando llegara a mi destino; y efectivamente a Joaquín no pueden darle nada distinto de onces, “galletas Festival y una avenita mamá”. “Alquería además de ser la leche preferida, se coló también en la categoría de avenas”, así lo dijo Fredy textualmente. Luisa compra 2 kilos de arroz Diana cada semana y solo sazona con caldo de gallina Maggi; y Diego… que decir de Diego, todos los días se toma al menos dos latas de Coca cola, es lo primero que hace al llegar del noticiero.

Todos viejos conocidos acostumbrados a convivir entre nosotros, el ego de “Coca” no es problema porque también es muy divertida cuando la sacan de la nevera, de Maggi siempre nos burlamos diciéndole que va a llegar el día en que del supermercado se aparezca un Ricostilla a reemplazarla (sabemos muchas historias de esas), Alquería siempre maternal en la tarea de hacer sonreír a Joaquín, y Diana con su hermosa piel blanca, su ternura y esa voz delicada que me hace suspirar cuando la escucho en las noches hablando de su vida con su amiga Doria. Quisiera que nos consumieran al mismo tiempo, para irnos juntos.

Todo estaba muy tranquilo hasta el miércoles en la tarde, cuando Luisa llegó un poco más temprano del colegio con una bolsa roja que no conocíamos, tenía una letra “D” en ella.

– Lo sabía! siempre lo supe, me lo dijo mi tutor. 

Dijo “Fami” asomada en la puerta del baño y mirando hacia la cocina. 

– De qué hablas Fami?, tranquila.

– Tiene la bolsa, tiene la bolsa!, y mira el tamaño, estoy segura que es papel higiénico.

– Eso es imposible Familia, cuántas compañeras tienes aún en el cajón, ustedes siempre llegan en bolsas de doce unidades, no?. No creo que necesiten más rollos antes de dos semanas.

– Ese es el problema Fresh, mi tutor nos lo advirtió el día que salimos. Hay una amenaza en todo el país, unos nuevos supermercados con la letra “D” y el número “1” por nombre. Llegaron con sus propias marcas, sin historia, no salen en los medios y tienen personalidades insignificantes, sin embargo los humanos las prefieren porque gastan menos dinero. Se llama Randys el maldito, áspero y delgado, además nadie bien comportado podría llamarse así.

Esa noche Fami no durmió, se rodó hasta la habitación donde Luisa guarda los productos de aseo y así confirmó sus sospechas. Randy había llegado a la casa en una bolsa de 16 rollos. La noche siguiente enloqueció y desveló a Diana (porque escucha a todos) contándole un plan que tenía para eliminar a su nuevo competidor, utilizando 5 litros de agua.

– Tengo que buscar a Diana !, pensé.  

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